Hoy vamos a hablar de un tema que hasta ahora no había tocado, y es que me ha llamado la atención una reseña de un libro que acaba de salir y que voy a procurarme inmediatamente: "Filosofía de las corridas de toros" de un autor llamado Francis Wolff
http://www.elmundo.es/elmundo/2009/10/27/cronicasdesdeeuropa/1256656631.html
No sorprenderá nadie que el autor de este blog sea aficionado a la tauromaquia, aunque no frecuenta los ruedos tan asiduamente como le gustaría. Pero ciertamente está entre los defensores acérrimos de la fiesta.
No sé si existen libros parecidos de autores españoles (aunque Sánchez Dragó en un libro reciente dedica muchas páginas al tema) pero lo interesante es que se trata de una defensa de los toros desde un punto de vista externo a nuestro país, un libro que reflexiona sobre los valores y el significado de esta hermosa fiesta desde una perspectiva más amplia, casi diría universal aunque expresada con un lenguaje filosófico europeo. Y por lo poco que el artículo deja adivinar del contenido del libro, el autor ha conseguido una rara profundidad, y ha conseguido también resaltar el porqué del rechazo de la sociedad moderna, de las corrientes de pensamiento que la dominan, hacia esta fiesta, en resumen porqué los toros son tan políticamente incorrectos.
No sé si existen libros parecidos de autores españoles (aunque Sánchez Dragó en un libro reciente dedica muchas páginas al tema) pero lo interesante es que se trata de una defensa de los toros desde un punto de vista externo a nuestro país, un libro que reflexiona sobre los valores y el significado de esta hermosa fiesta desde una perspectiva más amplia, casi diría universal aunque expresada con un lenguaje filosófico europeo. Y por lo poco que el artículo deja adivinar del contenido del libro, el autor ha conseguido una rara profundidad, y ha conseguido también resaltar el porqué del rechazo de la sociedad moderna, de las corrientes de pensamiento que la dominan, hacia esta fiesta, en resumen porqué los toros son tan políticamente incorrectos.
El tipo de sociedad que se está imponiendo en Occidente los rechaza como rechaza todo lo que es intenso y profundo, como rechaza la idea de la muerte y por tanto rechaza la vida, la creatividad y el pensamiento, para sustituir todo con una mediocre melaza políticamente correcta, sentimientos prefabricados, sistemas de medición matemática de la felicidad y el bienestar; en resumen, mediocridad a todos los niveles. La fiesta de los toros es un insulto, un desafío abierto a esta concepción del mundo, como lo es cualquier fiesta verdadera, en la cual existe siempre de una manera u otra, explícitamente o no, una conexión con aspectos oscuros de la vida, con el riesgo, la sangre o la muerte.
Es inútil repetir aquí las bellas frases del autor, invito a visitar ante todo el enlace y a comprar el libro, porque en mi opinión lo merece. También dedica alguna estocada a los animalistas haciendo notar el sentimentalismo ("Vemos los animales como creaturas de Disney") que hay detrás de su ideología. Y también esta consideración es plenamente válida. La relación entre el animalismo y la ecología es la misma que hay entre las películas de Walt Disney y los documentales de Félix Rodríguez de la Fuente. Seguramente las películas de Disney son entretenidas para los niños pero desde luego inadecuadas para formarse una concepción de la naturaleza en general, del mundo animal y del ser humano.